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Isaac se sentó con nosotros una vez más para contarnos qué había cambiado en la semana o un poco más desde que su dispositivo de estimulación epidural se encendió. Contó que le estaba yendo bien y contó su progreso a través de la fisioterapia diaria. Con el shock y la alegría de poder mover sus piernas y pararse en el primer día, Isaac continuó con sus próximos desafíos y se siente realmente esperanzado. Es fácil imaginar que Isaac estuviera nervioso por estar lejos de casa, recibiendo un tratamiento que es revolucionario, pero aún no se ofrece ampliamente.
“Yo estaba un poco vacilante sobre cómo iba a salir la cirugía y el implante … se sentía como una apuesta, ya sabes, tirar los dados. Ahora que he visto lo que ví el primer día, ser capaz de ponerme de pie con el estimulador encendido, estoy bastante optimista de como funciona este procedimiento ”
Sin embargo, la cirugía y la terapia hasta ahora parecían ser un gran éxito e Isaac ya había logrado lo que él pensaba que sería lo máximo que lograría de este procedimiento en un solo día. Lo que para él era un factor increíblemente alentador por sí solo. Sabía que lo peor había pasado y sus reservas sobre su cirugía de estimulación epidural habían desaparecido. Ahora, podría concentrarse en maximizar sus resultados.
“Ya tengo toda la función que pensé que era lo máximo que iba a lograr en el primer día”
Con un equipo de médicos y especialistas clínicos a su lado, Isaac se sentía mejor y mejor sobre su viaje a Bangkok. Quédate con nosotros para obtener más información sobre su progreso, entrevistas con otros miembros de su equipo y sus últimos días de tratamiento con nosotros.
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